Historia:

Gracias a su buen comportamiento los dioses la asignaron al rango de ángel guardián, logrando bajar a la tierra. 
Su misión era cuidar de una pequeña cuyos padres habían muerto en un accidente de auto, dejando a la niña huérfana y sin hogar, la tarea que los dioses habían asignado a Dee era protegerla de cualquier cosa que pudiera pasarle. Conforme los años pasaron y Julie, la niña a cargo de su cuidado crecía la tarea de Dee se volvió un tanto difícil, Julie pasaba de hogar a hogar sin establecerse en ninguno debido a su mal comportamiento, todos estos cambios generaban en Dee inquietud, terminando por encariñarse con la muchacha, sentimiento que jamás antes había tenido, Julie había sufrido y Dee lo sabía porque la veía a diario, era consciente hasta de sus pensamientos más profundos. La última casa en la que Julie fue acogida la llevo por un mal camino empezó a consumir drogas, a beber en exceso y a fumar. Agobiada por la situación y sintiéndose inútil Dee se presenta ante Julie dentro del cuerpo de un anfitrión humano, intenta alejarla de esos vicios pero es consumida por su anhelo a sentir cualquier cosa y al libre albedrío que presenta en esa forma lo que hace que se consuma en si misma, olvidándose de su misión por completo. 
Los dioses la castigaron dejándola en la tierra, siendo un ángel caído y despertando de una total oscuridad, no tiene a donde ir, y se da cuenta que tiene ahora una vida mundana, lo único que la consuela y avergüenza son sus alas que le recuerdan quién era y en que se ha convertido. 
Pasan semanas de sufrimiento para la chica antes de escuchar historias callejeras sobre un lugar Darkened City, que guarda secretos míticos, con la esperanza y la poca energía viaja a ese lugar esperando encontrar respuestas a todas esas preguntas pero sobre todo esperando volver a encontrarse con lo que solía ser.